¿Has visto hablar de RPM en ordenadores y no entiendes el concepto? Incluso si lo conoces fuera del ámbito de la informática, que es muy probable, quizás no tengas claro cuál es su uso en el hardware y en qué componentes podemos encontrarlo. Si ese es tu caso, o si directamente no conoces la unidad, este artículo es para ti.
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RPM son las siglas de revoluciones por minuto. Es una unidad de medición con la que, como su propio nombre indica, medimos el número de revoluciones a las que gira algo, generalmente un motor, por minuto. A nivel técnico estamos hablando de una unidad que se usa para expresar frecuencia y velocidad angular. A nivel práctico, simplemente hablamos de cuántas vueltas completas se hacen en cada minuto.
Podemos encontrar esta unidad en todos lados, sea el motor de un coche, o una lavadora. Como veréis, prácticamente hablamos de esta unidad cuando estamos trabajando con motores. En este artículo nos centramos en los ventiladores y los discos duros mecánicos, con una mención especial a las bombas de las refrigeraciones líquidas, que son básicamente los 3 sitios donde veremos esta unidad en un ordenador.
En un disco duro mecánico, hay un motor que hace girar los platos a una velocidad concreta. Así, luego cada cabezal puede acceder a la región adecuada para obtener la información necesaria. A nivel intuitivo podemos pensar que esta velocidad tiene mucho que ver con el rendimiento del disco, y es así.
La velocidad del plato o disco no se puede determinar directamente a partir de las RPM, pero sí podemos hacer una asociación entre este valor y la velocidad efectiva de toda la unidad. En particular, en el mercado de consumidor podemos encontrar unidades de 5400rpm o 7200rpm, estas últimas serán más veloces. Según nuestras pruebas con dos unidades de Seagate, permiten alcanzar un 88% más de velocidad de lectura y un 59% más de escritura.
Por este motivo, cuando se recomendaban HDD para equipos de sobremesa (hablo en plural porque ya están quedando relegados a almacenamiento masivo) siempre se pedía priorizar modelos de 7200rpm. Allí un juego va a cargar mucho más rápido, dentro de la lentitud que caracteriza a los HDD.
Pero ojo, ya que los modelos de 5400rpm también tienen su mercado: debido a su mejor sonoridad, temperaturas inferiores, menor consumo de energía y mayor fiabilidad son la opción a la que se suele optar si la idea es hacer almacenamiento sin más, es decir, tener archivos almacenados sin necesidad de ejecutar programas complejos en el HDD que requiera un rendimiento decente.
Destacar que, evidentemente, en los SSD que son los grandes sucesores de los HDD y que ya usamos casi todos en nuestros portátiles y equipos de sobremesa no tienen ningún tipo de RPM ya que no hay ninguna parte mecánica en su interior.
En un ventilador, el significado de las RPM es radicalmente simple, no estamos hablando de un HDD en el que hay varias piezas y tenemos que definir correctamente qué es lo que gira. En los ventiladores no es más que la velocidad de rotación del mismo. Es lo mismo que en un HDD, pero evidentemente podríamos equivocarnos y decir que erróneamente es la velocidad de rotación del cabezal, mientras que en un ventilador… pues no hay duda posible.
Dicho esto, ¿cuántas RPM solemos ver en ventiladores? ¿Qué es mucho y qué es poco? ¿En qué medida tiene que ver con la sonoridad?
Hay quien hace una asociación directa entre RPM del ventilador y sonoridad. Es obvio que un mismo ventilador va a hacer más ruido a más revoluciones, pero me estoy refiriendo a hacer comparaciones entre ventiladores distintos, o valoraciones generales. Y, la verdad, es que en cierto modo se puede hacer.
No podemos lanzarnos a la piscina y decir que un ventilador cualquiera a 800rpm será más silencioso que uno a 1000, pero realmente hay afirmaciones como que «un ventilador por debajo de 400rpm apenas se va a oír«, y generalmente se cumplen.
Hay ‘casos aparte’ en los que las revoluciones bajas producen ruidos molestos hasta llegar a un nivel de RPM determinado. Este comportamiento lo vimos en fuentes con ventiladores baratos como la Deepcool DQ850-M-V2L que analizamos en la web.
Eso sí, hemos de aclarar que la interpretación de las RPM está íntimamente ligada al diámetro del ventilador. 800rpm no es nada en un ventilador de 80mm, mientras que en uno de 140mm ya puede ser fácilmente audible.
Continuemos hablando de cómo se regulan las revoluciones por minuto de un ventilador. Ya que, a diferencia de un HDD normal y corriente, el régimen de giro puede variar de muchas maneras.
Primero veamos qué hay que cambiar para subir o variar las RPM:
Y continuemos viendo las maneras de definir cómo van a variar. Esto se hace mediante curvas de voltaje para el caso de unos ventiladores DC, o curvas de ciclo de trabajo en los PWM. Básicamente, se busca una variable, como podría ser la temperatura en un ventilador de CPU, y en esa curva cada valor de temperatura tendrá asociado un voltaje o % PWM determinado:
En este contexto, se pueden usar curvas automáticas definidas por el fabricante de la placa base, o el usuario puede crear las suyas manualmente. Lo mismo ocurre en GPU y ventiladores de caja, mientras que en los ventiladores de fuentes de alimentación. Igual que se regula la velocidad, está claro que también se puede poner el voltaje o % PWM a niveles en los que el ventilador estará apagado.
Os damos una buena ejemplificación de esto enseñándoos cómo varían las RPM según el % PWM de una fuente NZXT E650 con ventilador PWM (foto 1) y según el voltaje aplicado al ventilador DC de una Fractal Design Ion+:
No nos olvidamos tampoco de las refrigeraciones líquidas, donde las RPM son también una métrica muy importante y no solo por la banda de sus ventiladores: estos sistemas tienen una bomba que hace que el líquido circule y mantiene el circuito en correcto funcionamiento.
Evidentemente, estas bombas son muy pequeñas, y por lo que os explicamos antes es perfectamente normal verlas trabajar a muchas RPM, normalmente más de 2000.
El método más usado y sencillo para medir las revoluciones por minuto de un ventilador es simplemente consultarlo en un software de monitorización.
Cuando la consulta por software no está disponible, se suele recurrir a métodos “fisicos”. El instrumento estrella a usar es uno de los llamados tacómetros láser. Un tacómetro está pensado para hacer una medición de RPM, de hecho el valor que puedes ver en un coche es de un tacómetro.
En el caso de los PC, recurrimos a aquellos que funcionan por láser. Su método de trabajo es muy sencillo: colocamos una pegatina reflectante en el ventilador, y cuando apuntamos con el láser a ella su luz rebota, siendo recibida por el propio tacómetro. Claro, si lo pensamos concluimos que la luz se recibirá una vez por cada vuelta que de el ventilador, pues la pegatina reflectante está en un aspa. ¡Así se miden las RPM!
La parte positiva de este método es que es extraordinariamente barato y funciona lo suficientemente bien como para un uso que no sea demasiado exigente. Por 10-20 euros podemos encontrar un tacómetro totalmente funcional:
lcd digital de láser del tacómetro rpm 2.5-100000 Pantalla LCD grande; Amplia gama de medición y alta resolución.; La pantalla digital proporciona RPM exacta sin estimación o errores .18,99 EURÚltima actualización el 2022-01-21
Lo malo de esto es que estamos limitados a hacer la medición en ventiladores opacos y oscuros. Esto se debe a que la información que recibe el tacómetro se interpreta por un chip digital, que si ve algo lo suficientemente parecido a una luz reflejada lo contará como una revolución. En ventiladores claros o transparentes, las aspas prácticamente se harán pasar por la pegatina reflectante.
Este tipo de tacómetros son el instrumento con el que hacemos las mediciones en nuestras reviews de fuentes de alimentación y la verdad es que lo hemos notado bastante con todos los modelos con ventiladores blancos o translúcidos, donde no se podía hacer la medición.
Nosotros hicimos hace un par de años un análisis de una fuente digital en la que podíamos controlar sus RPM, y los resultados arrojados por software eran prácticamente idénticos a los medidos con el tacómetro barato. Esto significa que tienen una precisión muy similar y que el tacómetro va genial para estos usos.
Si quieres saber de cuántas RPM es tu disco duro mecánico, tienes afortunadamente varias opciones. La primera opción que te damos es comprobar el modelo concreto del HDD, algo que puedes hacer de varias maneras.
Puedes comprobarlo directamente en el HDD, ya que es una información que aparecerá claramente indicada en la pegatina del mismo, y de hecho incluso es muy probable que directamente encuentres el dato de RPM en la pegatina.
También puedes saber tu modelo de HDD desde el Administrador de tareas de Windows. Accede a este mediante la combinación de teclas Ctrl+Alt+Supr (o directamente vía Ctrl+Shift+Esc), entra en Más detalles, para ir a la pestaña de Rendimiento y consultar allí tu HDD.
Una vez tengas el nombre de modelo, obtenido de la forma que sea, simplemente es cuestión de buscar en Google hasta que encuentres tu HDD.
La otra opción, si cabe más directa, es usar programas como CrystalDiskInfo. Es una opción muy interesante ya que no solo nos dirá directamente la velocidad de rotación del HDD, sino que además nos informará sobre su estado de salud, así que podéis aprovechar para comprobarlo.
Te recomendamos la lectura: ¿Qué es CrystalDiskInfo y cómo revisar la salud de nuestro SSD?
El concepto de RPM o revoluciones por minuto no es más que una unidad de velocidad de rotación / velocidad angular que nos indica cuántas vueltas completas realiza un cuerpo en un minuto. Se usa mucho para indicar la velocidad de giro de un motor, y por ello tiene mucha presencia en los PC.
En un ordenador, encontraremos este dato predominantemente en discos duros mecánicos, ventiladores y bombas de refrigeración líquida. En el primer caso determinarán la velocidad de giro de los platos del HDD, que en discos del mercado doméstico suele ser de 5400rpm o 7200rpm. Aquí, a más RPM más velocidad, pero también más ruido, consumo energético, temperaturas y quizás menos fiabilidad.
En el caso de los ventiladores, básicamente definen a qué velocidad giran estos, pero hay varios puntos a destacar. Por ejemplo, que evidentemente más RPM implica mayor sonoridad (y flujo de aire), pero todo depende del diámetro del ventilador y del modelo concreto. Aunque hay afirmaciones que sí se suelen cumplir como que por debajo de 400rpm un ventilador casi no se escucha.
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Otra cosa a considerar a este respecto es que hay distintas maneras de regular las revoluciones por minuto de un ventilador: puede que se controle mediante modulación de pulsos PWM, que es la manera más avanzada, o simplemente regulando el voltaje que se alimenta al ventilador. También hay que ver si tenemos la posibilidad de regularlo nosotros mismos (ventilador de caja, de CPU, de GPU) o no (de fuente de alimentación).
No nos olvidemos tampoco de las refrigeraciones líquidas, cuya bomba girará siempre a una velocidad concreta para permitir el funcionamiento del circuito. Es normal ver más de 2000 RPM debido a su compacto tamaño.
Esperamos que este artículo te haya sido de ayuda para saber lo que son las RPM si no lo sabías, y si ya tenías claro el concepto, que por lo menos hayas aprendido algo nuevo. ¡Gracias por leernos!
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